6. Praga, XIV Congreso Mundial de Psiquiatría.

Acaba de celebrarse el XIV Congreso Mundial de Psiquiatría en Praga (20/25 -9 - 2008). Como en otros encuentros científicos de cierta magnitud, acudí al mismo, no sólo interesado en sus contenidos profesionales y otras motivaciones turísticas, sino con la expectativa de encontrar entre las librerías y editoriales participantes en la exposición comercial algún volumen con contenidos fotográficos o en relación con ellos.
Sólo en muy pocas ocasiones he conseguido traerme a casa alguna publicación así de un Congreso. Esta vez tampoco ha podido ser, sin duda reflejo del descuido y aparente desinterés por el tema.

Uno de los más gratos y sin duda valiosos recuerdos que me he traído del Congreso es la amable invitación para visitar el hospital psiquiátrico de Bohnice. Situado en las afueras de Praga, celebrará el próximo año el centenario de su inauguración oficial con varios encuentros científicos, entre ellos uno sobre historia de la psiquiatría y la expectativa de editar un libro con fotografías históricas del hospital, según me adelantaron. La visita, explicada con entusiasmo por el Dr. Jirí Svarc, nos condujo a lo largo de un extenso entorno cuajado de árboles imponentes y durante la misma no hubo dificultad alguna para fotografiar también el interior de los pabellones visitados (con la obvia prevención de salvaguardar la identidad e intimidad de los pacientes). Pueden quedarnos dudas en cuanto a si esa permisividad a la hora de disparar las cámaras se hubiera dado en caso de no ser un grupo de profesionales, pero no cabe duda que lugares donde se permite la entrada de cámaras, incluso a pesar de las precarias instalaciones como las que aquí se disponían, deja claro que no tienen nada que ocultar y si mucho que mostrar a la sociedad para que esta exija a sus administradores una mejora de las condiciones asistenciales de las personas allí atendidas.



Pabellón de agudos (hombres). Otras imágenes tomadas durante la visita muestran la precariedad y hacinamiento de las instalaciones, así como evidencian prácticas restrictivas (similares a las nuestras), mucho más confrontadoras al verlas así congeladas. Foto: Fernando Santander.

Por otra parte, quienes si supieron como utilizar imágenes fotográficas en su propio interés fueron los de la Iglesia de la Cienciología de L. Ronald Hubbard. Enemigos declarados de la psiquiatría y los psiquiatras, tienen por costumbre hacerse presentes con sus denuncias en los grandes encuentros científicos de carácter psiquiátrico. En esta ocasión montaron una exposición paralela titulada “Psiquiatría ¿ayuda o muerte?”, con un costoso y estudiado diseño, donde sobresalían las imágenes fotográficas más inquietantes de nuestra especialidad. Avisaremos al lector desprevenido que la secta está convencida de que nuestras almas provienen de mundos extraterrestres remotos, donde nuestros ancestros fueron sometidos por perversos psiquiatras mediante inyecciones de alcohol y glicol (¡ahora podemos entender mejor su psiquifobia!), mientras que en este mundo ellos se dedican a diagnosticar y tratar el “estrés”con máquinas misteriosas, entre otros lucrativos negocios. En todo caso, las imágenes presentadas en su exposición pueden servir de contrapunto que nos permita no perder de vista la necesidad de seguir alerta para cuestionarnos continuamente incluso prácticas que hoy consideramos aceptables.

Cartel anunciador de la exposición organizada por la Iglesia de la Cienciología, a la salida del metro.

Con ocasión del Congreso y como actividad complementaria al mismo, se organizó en el centro de la ciudad una exposición que bajo el título "Art Brut y Arteterapia" conjuntó tres espacios diferenciados, y a los que fuimos a buscar la presencia fotográfica. Una de las presentaciones, que recogía la producción artística realizada en diversos centros asistenciales checos, seguramente reflejo de la poca penetración que tiene la fotografía como técnica dentro de las terapias por el arte, incluía sólo un collage de imágenes fotográficas recortadas de revistas. Otro apartado, que mostraba una selección de la colección de Art Brut de la Asociación Mundial de Psiquiatría mostraba también un pequeño collage presentado como “Sin título (mujeres con intestinos)”, realizado a principios de los años 90 por el americano Rick Petrea (1951-), artista y terapeuta ocupacional en el Georgia Regional Hospital de Atlanta y de quien el programa de la muestra decía: “un artista que utiliza el estilo del Art Brut para ser comercializado con mayor éxito”, sea lo que sea lo que eso quiere decir.

Collage de Rick Petrea. Foto: Fernando Santander.

La tercera parte de la muestra fue una colección de 12 imágenes de Jindrich Streit (1946-). Consagrado fotógrafo checo que nos muestra a diferentes personas aquejadas de una enfermedad mental que viven en diversos entornos asistenciales. Desconozco si las fotos han sido publicadas en algún otro medio y esta búsqueda será una tarea a considerar para el futuro.



Fotografías de Jindrich Stein de pacientes institucionalizados.

Como anécdota de potencial interés tangencial para “psiquifotos”, apuntaremos que una de las conferencias plenarias corrió a cargo de Pavel Bem, controvertido alcalde de Praga y una sorpresa conocer que era psiquiatra. Realizó una cautivadora presentación en torno a una expedición por él realizada al Everest, apoyándose en una serie de preciosas fotografías de la excursión y encuadradas por diferentes citas de psiquiatras famosos.

Para no extendernos más, y ya que estamos en la República Checa, reservaremos las próximas entradas a otros fotógrafos originarios de este país, si bien nada similares entre si. Pero antes de terminar, tengo que hacer referencia obligada a la imagen que más ha captado mi atención en este Congreso. Tomada en algún lugar de Africa para Global Initiative on Psychiatry, queda aquí para la reflexión.